Skip to content

El señor José Yaraure Morillo, conocido como «El Morocho»

25 de diciembre de 2024

Una reunión familiar que la noche del pasado 21 de diciembre celebraban unos venezolanos en Creeldale Drive, Norcross, Georgia, terminó en tragedia cuando Víctor José Yaraure Morillo, conocido como «El Morocho», utilizó un arma de fuego durante la velada.

Jackmerly Jouselys Hernández Rodríguez, de 31 años, falleció de manera inmediata tras recibir un disparo en la cabeza.

La víctima era oriunda de Coro, estado Falcón, Venezuela, y había llegado a Estados Unidos hace casi un año en busca de un mejor futuro para su hijo de 10 años.

Detalles del incidente

Aproximadamente a las 7:00 de la nocheVíctor sacó una pistola, recreando escenas que testigos calificaron como «malandreo».

Según los relatos, pese a las advertencias de guardar el arma, incluso por parte de Jackmerly, él continuó manipulándola de manera imprudente.

Aunque retiró el cargador del arma, no verificó la recámara, donde aún quedaba un cartucho. Al presionar el gatillo, disparó accidentalmente, impactando fatalmente a Jackmerly, quien estaba cerca de él.

El arma utilizada pertenecía a su hermano, Brayan, quien también estaba en la reunión. Tras el hecho, Víctor Yaraure huyó del lugar y permanece como fugitivo, según medios como Fox5 Atlanta y Univisión.

Jackmerly era una madre dedicada, conocida en su comunidad en Venezuela por buscar siempre lo mejor para su hijo.

Recientemente había recibido sus documentos legales para residir y trabajar en Estados Unidos, lo que había motivado aún más su esperanza por un mejor futuro.

En Coro, sus familiares ahora enfrentan un arduo proceso de trámites y recaudación de fondos para lograr la repatriación de su cuerpo.

Familiares y testigos exigen una investigación exhaustiva del caso, cuestionando las versiones ofrecidas por los allegados del homicida.

«Nadie con cuatro dedos de frente lleva un arma a una reunión familiar, especialmente donde hay niños», expresaron.

Impacto en su hijo

El hijo de la pareja, de solo 10 años, presenció el trágico evento y ha quedado profundamente traumatizado por la pérdida de su madre y la situación de su padre.

Las autoridades del condado de Gwinnett continúan investigando el caso, mientras la comunidad venezolana en Georgia lamenta esta tragedia y busca apoyar a los familiares de Jackmerly.

VER FOTOGRAFIAS