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La señora Sorángel Peña

7 de marzo de 2025

Sorángel Peña no soportó el dolor de perder a sus únicos hijos, Leovanny y Giguendon Peña Rojas, asesinados por un hombre que irrumpió en la lavandería donde trabajaban, en el condado de Chester, Pensilvania, Estados Unidos, en mayo de 2024.

Diez meses después de esta tragedia, la comunidad de Los Brazos, en Jamao al Norte, provincia Espallat, vuelve a estar de luto tras la muerte de Sorángel.

Su familia lo había notado, pues sus hijos eran todo para ella y “la trataban como una reina”.

“Nunca tuvo paz después de la muerte de sus hijos”, dijo su prima Rossi Peña a Listín Diario en un mensaje de WhatsApp, mientras se escuchan los quejidos y gritos de otros familiares.

Y desde que se conoció la noticia del asesinato de los jóvenes, su madre estaba «como muerta en vida» y no quería ni tomar agua», dijeron entonces familiares a este diario.

Tiempo después, a la mujer de 56 años le diagnosticaron un cáncer en la sangre, aunque ya tenía problemas en la piel.

Los restos fueron colocados en la casa «grande y bonita» que le construyeron sus hijos. Mientras tanto, en el cementerio local se construyó su nicho junto a los de sus hijos. «Están los tres juntos, donde están sus dos hijos», dijo Rossi.

El alcalde Jairo Morillo expresó su tristeza y compartió el obituario publicado por la junta vecinal Los Brazos, en el que destaca que la partida de Sorángel «deja un gran vacío en nuestros corazones y en toda nuestra comunidad».

Al salir del velorio a la medianoche, envió un mensaje de texto en el que destacó que había mucha gente y mucho dolor. «Es una comunidad muy singular, donde el 90% de la población está formada por familias. Los apellidos son Peña y Vásquez.

Los hermanos Peña Rojas, de 23 y 24 años, murieron cuando un ex trabajador de lavandería, el puertorriqueño Wilbert Peña Ruiz, irrumpió en la casa y lesionó a otros trabajadores.

Otra mujer, familiar, dijo que Sorángel tenía problemas en la piel, pero «todo empeoró después de que murió». A partir de entonces, se enfermó casi cada dos semanas, y estuvo grave unos dos meses. Estuvo en la cárcel diez días, la trajeron, volvieron y ya hace como una semana que la liberaron.

El padre de sus hijos

Un dolor en medio de las compras. Esa es la situación del señor Geovanny Peña, padre de los jóvenes fallecidos, quien fue a Estados Unidos a repatriar los cadáveres el año pasado, y que ahora está de regreso en este país, según la información, porque la vista del caso se pospuso para el 17 de este mes.