San Cristóbal, RD. – El joven Antonelli Guzmán habló públicamente luego de que un video suyo se hiciera viral en redes sociales, mostrando el momento en que era perseguido por dos agentes de la Policía Preventiva durante un confuso incidente registrado en una calle del municipio cabecera de San Cristóbal.
El audiovisual, difundido ampliamente en plataformas digitales, ha generado una ola de comentarios y críticas hacia el accionar policial. En las imágenes se observa cómo Guzmán graba con su teléfono celular mientras los agentes le ordenan detenerse en una zona con escasa iluminación.
Según explicó el joven, decidió no detenerse de inmediato por temor a su seguridad, ya que el lugar donde los agentes intentaron interceptarlo estaba completamente oscuro. “Yo no me negué a pararme, simplemente busqué un sitio donde hubiese más claridad. No me sentía seguro en la oscuridad”, declaró Guzmán a medios locales.
Temor por su seguridad
Tras el incidente, el joven expresó sentirse preocupado, asegurando que presuntos miembros de la uniformada se presentaron posteriormente en su lugar de trabajo preguntando por él. Aclaró que no posee antecedentes penales ni conflictos con la justicia, por lo que desconoce las razones del intento de detención.
“Estoy dispuesto a ir donde me citen, lo único que quiero es que me escuchen y que se garantice mi seguridad”, manifestó, dejando claro que se encuentra en total disposición de colaborar con las autoridades para aclarar los hechos.
Debate en redes sociales
El video ha desatado un amplio debate sobre el protocolo de actuación policial, especialmente en operativos nocturnos y en zonas poco iluminadas. Numerosos usuarios en redes sociales han exigido una investigación transparente para determinar si los agentes actuaron conforme a los reglamentos establecidos.
Hasta el momento, la Policía Nacional no ha emitido una versión oficial del suceso. Se espera que el Departamento de Comunicaciones ofrezca en las próximas horas un comunicado aclarando los pormenores del caso.
Contexto
Este incidente se suma a otros reportes recientes en los que ciudadanos han denunciado presuntos abusos o procedimientos irregulares durante detenciones nocturnas, lo que ha reavivado la discusión sobre la confianza entre la población y los agentes del orden.