La comunidad de Los Alcarrizos, en Santo Domingo, se encuentra profundamente conmocionada tras conocer la trágica muerte de un niño de dos años, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas por las autoridades.
La familia del niño ha señalado a su madrastra, Eliza Valdez, como la principal sospechosa. La acusan de abusar físicamente de él repetidamente, lo que presuntamente provocó su muerte.
El menor vivía en la zona de La Cuaba con su padre biológico y su pareja.
Al momento de su muerte, el niño presentaba signos visibles de violencia, incluyendo hematomas en las piernas y la cabeza, quemaduras en los dedos y un yeso en el brazo.
Los familiares afirman que el niño no tenía problemas médicos, se mantenía activo y parecía feliz ante este cambio de entorno.
Yaneli Vicente, abuela materna del niño, expresó su profunda tristeza porque, tras la salida de su hija, madre biológica del niño, tras inmigrar ilegalmente a Estados Unidos por la ruta conocida como «retorno por México», ella se hizo cargo tanto del niño como de su hermana de seis años.
«Cuidé bien de mis nietos. Ese niño no tenía problemas de salud. Era feliz. Hasta que su padre vino a buscarlo», dijo entre lágrimas.
Luis Alberto Hierro Núñez, abuelo del niño, y Richard Vicente, su tío, informaron que el padre de los niños afirmó que vivían con él. Aunque la familia materna no estuvo de acuerdo, no pudieron detenerlo.
«Siempre fue un buen padre; siempre los cuidó. Pero desde que se los llevó, nos estaba bloqueando el camino». «No nos decía cómo estaban los niños», dijo Vicente.
Los familiares dicen que desde que los niños se mudaron con su padre y su madrastra, la comunicación ha disminuido considerablemente.
Esta situación ha causado preocupación, a pesar de que nadie hubiera imaginado que uno de los niños pudiera perder la vida con signos tan evidentes de abuso.
Aún no se ha confirmado si Eliza Valdez ha sido arrestada.
Sin embargo, la familia del niño exige respuestas claras a las autoridades y justicia para el niño fallecido.
«Esto no puede quedar impune. Este niño murió con dolor y alguien tendrá que pagar por ello».
La comunidad se ha unido a las peticiones de las familias para que se realice una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y, de comprobarse las acusaciones, se apliquen las leyes correspondientes.
