Ana Josefa Castillo, madre de la niña Elianni Frías, llamó a Esmerlin Javier Frías pasadas las 7:18 de la mañana del jueves 15 de agosto. Durante la llamada, le informó que había ocurrido un problema en la casa, según se detalla en la solicitud de medidas coercitivas presentada por el Ministerio Público. Unos minutos después, Ana Josefa llamó a su esposo para recordarle que algo grave había sucedido. Esmerlin entonces se percató de la presencia en la casa.
Según el informe de la Fiscalía, Esmerlin Javier Frías se comunicó con una vecina para que fuera a la casa. Al llegar, la vecina fue recibida por el hijo de cinco años de la pareja, quien le abrió la puerta. Al ingresar a la casa, la mujer descubrió el cuerpo de Elianni Frías en la cocina, boca abajo y decapitado, mientras que la cabeza de la niña estaba en el baño de la habitación principal.
A las 8:55 a.m., el cuerpo de la menor fue levantado por las autoridades, presentando signos de decapitación y múltiples heridas punzantes penetrantes en diferentes partes del cuerpo.
Feliciano Lacen, presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), expresó su preocupación por la situación, por lo que sugirió que el esposo de Ana Josefa Castillo sea investigado y reciba atención psiquiátrica, recalcando que podría estar enfrentando un desequilibrio mental. Además, resaltó la necesidad de que la menor que presenció este trágico hecho reciba atención psicológica.
El documento de la fiscalía también señala que debajo del cuerpo de la niña se encontraron un par de anillos de matrimonio y varias prendas ensangrentadas. Feliciano Lacen mencionó en su declaración que este no es un caso aislado, sino que forma parte de una situación más amplia que incluye una desconexión de lo sagrado y un aumento de los problemas de salud mental, calificándolo como un poder diabólico que afecta la mente de muchas personas. .
En entrevista con el hermano de la víctima, éste indicó a las autoridades dónde se encontraba el cuerpo y describió la escena del crimen. Además, denunció haber visto a su madre tomar un cuchillo en sus manos y lanzarlo por la ventana de su habitación.
La defensa de Ana Josefa Castillo solicitó una evaluación médica para su clienta, argumentando que desde 2013 recibe medicación para trastornos esquizofrénicos.