Ana Josefa García Cuello, médica del ejército dominicano, ha sido acusada de un crimen atroz: la decapitación de su hija de seis años en el sector de Hainamosa, Santo Domingo Este. Sin embargo, el médico dijo que ella sería incapaz de cometer tal acto contra su propia hija.
En sus declaraciones, García Cuello negó categóricamente haber decapitado a la menor y afirmó que no podía dañarla de esa manera.
El caso causó gran revuelo en la opinión pública, especialmente en las redes sociales, donde los usuarios compartieron sus opiniones y especulaciones sobre el estado mental de García Cuello. Algunos comentarios indican que la doctora puede estar usando sus conocimientos de psicología para fingir demencia, específicamente esquizofrenia paranoide, lo que ha llevado a muchos a cuestionar su cordura.
Algunos internautas expresaron su incredulidad ante la aparente falta de dolor de García Cuello, señalando que no se la vio llorando por la muerte de su hija. Otros comentarios sugieren que el médico puede estar fingiendo shock o incluso buscando una excusa para recibir un tratamiento más indulgente.
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El caso también generó dudas sobre cómo el padre de la niña se enteró del crimen y alertó a un vecino, quien supuestamente dio una versión diferente de lo sucedido. La falta de detalles claros y coherentes ha contribuido a la confusión y el escepticismo que rodean los acontecimientos.